Cuando tú rozas la piel de alguien simplemente la sientes, yo, a partir sólo de ese roce creo una persona, creo sus manos, el tacto de su piel, el color de sus ojos, si sus pestañas son largas o sus labios son finos, yo imagino a las personas, las invento. Lo hago desde sus defectos y virtudes, a partir de un ligero roce, de sus palabras, sonrisas y de sus ideas. Y eso, es más grande de lo que jamás podrás ver.
Y piensa que quizás seas tú quien está ciega,
no yo que sin poder ver consigo crear
y tú, pudiendo hacerlo prefieres ignorar y juzgar.
y tú, pudiendo hacerlo prefieres ignorar y juzgar.